Make It Happen

Decisiones que uno no se atreve a tomar. Ojos llorosos que demuestran el cariño infinito. Manos que tiemblan, y cierto miedo a lo desconocido. Asi es como se despide mi familia de mi abuelo. Él cierra los ojos y desde lo màs profundo de su ser, donde su enfernedad todavia no puedo llegar, el desea y espera su momento de partida. Los que quedan, de forma egoista pretenden retenerlo sin importar las consecuencia, sin saber que lo unico que se hace es atrasar un hecho que a corto plazo va a suceder. Es increible como algo tan natural como la muerte misma la cual es parte de la vida, sea tan dificil de aceptar. La ley de la naturaleza toca a todo aquello que tenga un corazon que late, y sin embargo nunca nos terminamos de acostumbrar a las despedidas.En vez de recordar buenos momentos y pensar que vivio 87 años de una vida plena, uno se sumerge en la nostalgia y tristeza y se aferra a un ser vivio que si pudiera aunque sea balbusear, pediria a gritos que se lo lleven.Yo no creo en los funerales. Vestirse de negro, un muerto que te mira, gente que llora. No conozco a una sola persona que le guste ir a un funeral, entonces que es lo que nos pasa? Tan culturalizados estamos? Yo harìa una ceremonia, juntarìa a toda la familia y festejaria por aquellos años de felicidad que el difunto disfruto y por aquellos que a los que viven nos faltan disfrutar. Y asì aprender a valorar lo que uno tiene y a respirar tantas veces como se nos conceda.

En las plazas ya no hay mas areneros. La pelota se cambio por los videojuegos y los amores ya dejaron de ser eternos. Acostumbrados a esto, negamos querernos, y nos saludamos con besos falsos en la
mejilla. Es que lo nuestro no volvió a empezar; lo nuestro nunca termino. Pero este mundo contemporáneo nos nubla los ojos y no nos deja que podamos vencer el orgullo que tan involucrado esta en nuestra relación.
Como negar que cada vez que nos rozamos piel a piel, las palpitaciones aumentan y el mundo se resume en solo unas caricias en el cuello, sin importar los murmullos que luego recorren las paredes. Como hacerse cargo de esas pupilas negras, cómplices de los ratos que pasamos juntos intentando descifrar que es lo que tanto nos une y no deja en el olvido lo que fuimos y somos.
Sos el reflejo de mi alma, aquello de lo que a veces me arrepiento y otras me llena de placer. Sos lo que nunca quise tener y siempre tuve. El que me pone nerviosa, el que me irrita, el que sabe mis puntos mas débiles. Sos el olor de mi adolescencia. Verte a vos es recordar mis más lindos momentos.