Thursday, October 01, 2009

Me gustaría invitarte a conocerme. Te mostraría lo difícil que es no tenerte, y lo mucho que me duele amarte. Me lastima cada vez que te veo, sentirte cerca me produce dolor.
Mi locura hacia vos tiene cierta ironía, porque te amo tanto que te llego a odiar. Este absurdo tan incoherente hace que cada vez que te desee también te desprecie.
Nuestro amor es sarcástico, pues pretende ser agresivo mientras se entrecruzan las miradas más dulces y receptivas. Intenta ser violento, cuando tus manos son las más dóciles al pasar por mi cintura. Cree ser provocador e inestable, cuando en realidad lo único que perduro en estos años fue el saber aceptarnos y querernos sin límites ni condiciones.
Me gustaría invitarte a conocerme, para que sepas que cada minuto que te regalo lo hago con todas las ganas que puedo llegar a tener, y cada beso que toca tus labios son los más lindos que puedo llegar a dar.
Me gustaría invitarte a conocerme, para que sepas que nos hago desear para que fluyan las ansias y te desesperes por tenerme, para que cada encuentro sea único y perfecto.
Por que todo lo que se hace esperar, se desea aun más; y cuanto más difícil es de alcanzar más lo vas a esperar.